miércoles, 2 de diciembre de 2009

Yamaha V-Max 1700

Yamaha V-Max 1700

Durante este gélido y larguísimo invierno que nos está tocando vivir, hay pocos momentos en que pueda decir que he pasado verdadero calor y sofoco, pero sin duda uno de ellos ha sido cuando por fin puede montarme en una de las motos más esperadas y espectaculares de esta nueva temporada. Como podrá reducir, estoy hablando de la nueva generación de la reina de las “muscle bikes, “, la emperadora de la aceleración y la única moto del mercado que ha logrado mantenerse casi 25 años (apareció en el año 1985) en perfecta forma gracias, entre otras cosas, a su portentoso motor y un diseño que se adelantó varios lustros a su época. En un principio el mercado le recibió con tibieza, pero el tiempo la puso en su sitio y se ha convertido en un verdadero mito que, tras varios años de desarrollo y muchos rumores sobre su aparición, ha logrado tener una sucesora a su altura. Con medio litro más de cilindrada y toda la tecnología actual que te puedas imaginar, Yamaha ha logrado un modelo que ya era un éxito antes de llegar a las tiendas … o mejor habría que decir a las calles, puesto que sólo se pueden encargar por Internet. Así que olvídate de ir a una tienda a encargarla, aparte de que además todas las unidades de este año están ya vendidas. Si quieres saber cómo es y cómo va la única moto capaz de producir una tórrida ola de calor en pleno invierno siberiano, aquí tienes nuestra prueba.
Nuestro equipo de pruebas se protege con:
Cascos
: Nitro , Givi , NZI y Shad
Cazadoras: Nitro, Motorrad, Teknic y Scott
Monos de cuero: Motorrad y Teknic
Guantes y botas: Teknic

Agradecimientos a MGE y las cadenas de tiendas Motorrad y Basi

Yamaha V-Max 1700

Precisamente el propulsor es el elemento alrededor del cual se construye toda la moto, puesto que no solamente se ha convertido en un mito ya desde la anterior versión de 1200 por su potencia bruta y su espíritu “dragster”, sino que estéticamente es fundamental para lograr ese aspecto musculoso que precisamente dio nombre al segmento que inauguro la misma V Max. Para lo primero- es decir, para la potencia y el par desbordantes- se incrementa de la cilindrada hasta los 1700 y se incorpora toda la tecnología heredada de MotoGP y las superdeportivas R1 y R6. Así cuenta con acelerador YCC-T, que logra ajustar todo el sistema de alimentación con el del acelerador mediante sensores y un sofisticado sistema electrónico, junto con el sistema de admisión variable YCC-I (Yamaha Chip Controlled Intake) por el cual las trompetas de admisión se alargan o acortan dependiendo de la velocidad a la que se vaya.
Así se consigue un tacto poderoso desde las catacumbas del tacómetro , tanto que desde luego no es un motor apto para novatos. Su aceleración es bestial y puede llegar a alcanzar, por su desarrollo bastante corto y ciertas limitaciones electrónicas, los 240 km/h a pesar de sus 200 caballos declarados que la permitirían llegar mucho más allá. Algo acertado, habida cuenta de la filosofía y aerodinámica de la moto. Por otro lado, alcanza los 100 por hora en 3,7 segundos y los milímetros en 21 segundos.

Yamaha V-Max 1700

Mientras que la anterior modelo fue el mayor representante de lo que se dio en llamar una moto “todo motor”- es decir, que las prestaciones desbordaban totalmente al chasis y al resto de la parte ciclo- aquí se ha cuidado especialmente que, además de acelerar y correr como no te puedes hacer una idea, sea estable y que frene donde el piloto desee. Así, se equipa de una excelente horquilla de barra negra, para sorpresa de todos convencional en vez de invertida, y un buen amortiguador trasero, ambos multiregulables por mandos remotos. Un excelente sistema para una moto que necesita ajustarse a cada conductor para dar lo mejor de sí.
Por otro lado, el chasis es un doble viga de aluminio pero con un diseño de vigas relativamente estrechas y que en el motor por arriba para poder dejar a la vista al poderosísimo V4. En cuanto los frenos, equipa 3 discos Wave, estando los delanteros mordidos por sendas pinzas de 6 pistones cada una . Su frenada es potente y contundente sin llegar a ser excesivamente agresiva con algunas deportivas.

Yamaha V-Max 1700

Teniendo en cuenta que declara 315 kilos de peso, es una moto realmente larga, y que cuenta con un “gomone” trasero de 200 mm, es fácil deducir que en parado o a baja velocidad no será una moto fácil de manejar . No obstante, cuando aumenta la velocidad la vas sintiendo cada vez más fiable y con un tacto de chasis, frenos y amortiguación a años luz del anterior modelo. En recta es capaz de hacer resbalar el neumático trasero incluso en marchas medias y en curvas sorprende su estabilidad, aunque por sus características es realmente subviradora y las estriberas rozan muy pronto. Con su peso, aerodinámica y desarrollo era de esperar que los consumos no fueron especialmente bajos variando desde los 7,8 hasta unos estratosféricos 14 si de verdad le buscas las cosquillas a este motor, por lo que si tenemos en cuenta un depósito de 15 l deducimos que su autonomía es más bien escasa.
No obstante, el verdadero placer de tener esta moto es sentir como todas las cabezas giran cuando pasas y sobre todo esa sensación infinita de poder, pero la vez de seguridad, que tienes en el puño derecho en cualquier momento, lleves la marcha que lleves o cualquiera que sea el desnivel de la carretera. La V- Max debía ser la moto más poderosa de todas, la reina de la aceleración, la emperadora del empuje sin fin y de un par digno de un camión, la más impactante y mayor generadora de adrenalina de todo el mercado
Gracias a esta nueva generación creada por Yamaha, lo sigue siendo.

Yamaha V-Max 1700



Yamaha V-Max 1700 A favor:

+ Motor.
+ Diseño.
+ Terminaciones.
+ Mejoras en toda la parte ciclo.

Yamaha V-Max 1700 En contra:

+ Precio alto.
+ Aerodinámica.
+ Peso excesivo.



David G. de Navarrete, Autocity
10 de febrero de 2009


Fuente
Moto City

No hay comentarios:

Publicar un comentario